domingo, enero 18, 2009

DIVAGO MI NOMBRE.


¿Qué de mis huesos si hubiera olvidado mi nombre? ¿Dónde vagaría mi oquedad si las ventanas hubieran cerrado postigos? ¿Qué de mis parónimos si los libros no existieran?

Acaso talle hojas de molde y refranes en paredes que dejaron de mirarme. Quiera el sino, tal vez, que mi nombre se pegue a devaneos del camino y ruede por pendientes escabrosas.

Bienvenido el azar de esa fortuna.

Pues al morder fango y transitar oscuridad, vuelvo fortalecida. Y resuena entonces la propia voz con el propio nombre más afanoso. Y el lodo deviene en ópalo que me sostiene ante diluvios.

Y troca la oscuridad en luz e inunda los resquicios donde antes moraban fantasmas.

Que parten ante el fénix renaciente.

©Viviana Álvarez

DE CUANDO EL OLVIDO NO PUEDE.



Archivó a buen resguardo los dones recibidos. Pretendió ignorarlos en noches ebrias, cuando deambulaba por el mundo con sus pecados a cuestas.

Al interrogarlo sobre sus antiguas dotes, esgrimía excusas copiadas de novelas leídas de niño. Se escapaba por tangentes dudosas, para llegar al punto de partida.

Desconocía el motivo del hecho. Simulaba no darle importancia, más extrañaba aquello heredado de vaya a saber qué ancestro.

Este estado duró varias lunas. Y giró el universo y a cada giro, se impacientaba.

Adormecido en aquella mezcla de extrañez y olvido, se le presentó su maestro y lo llevó hasta su origen.

Desde esa noche, volvió a su misterioso halo, a su mística soledad, a beber sangre de la mano del olvido.

©Viviana Álvarez

sábado, enero 03, 2009

ANTIGUAS DEUDAS (POEMAS A ELLA)


I

reverdece ansiosa
de pesares

ella, que intentara esperanza
busca redención


II

renace fuentes
silentes otrora

ella, olvidada de lunas
conjura sombras


III

le brota entonces
la voz

que antaño fuera
cítara de muertos


IV

canta ritos
cierra iglesias

ella, la descreída
juega en un damero
su vida futura


V

no entiende idiomas santos
sólo sabe de muerte

entonces calla inquietudes
y vuelve a su tumba


VI

cuando se aquietan grises
y es opaco su cielo

ella, la renacida
cancela deudas



©Viviana Álvarez

absuelvo madrugadas


absuelvo madrugadas
dilapido ocasos

el fervor nocturno
ansias no copuladas

y el vano sudor
que dibuja ausencia
entre mis raíces y tu densidad

©Viviana Álvarez