domingo, diciembre 28, 2008

ÉXTASIS MACABRO

A LOS QUE ROBAN MIS ESCRITOS PARA PONERLOS EN SUS PÁGINAS OMITIENDO MI AUTORÍA, A VER SI CUANDO ROBAN ÉSTE, CAMBIAN DE TÁCTICA Y PONEN MI NOMBRE COMO AUTORA DEL ESCRITO.
GRACIAS
VIVIANA GLADIS ÁLVAREZ


La noche invitaba a la ensoñación. La tormenta irisaba los nervios de Pablo que por entonces, vivía solo en la casona que olía a cementerio. Dueño de un pasado entre trágico y tétrico, despertaba algunas dudas entre sus vecinos. Especialmente por algunas cicatrices en la cara.
Era más bien melancólico. Amable con todos y solidario.
Ella vivía en la casa lindante.

Pablo no conciliaba el sueño. Hacía años no dormía bien. Su sueño recurrente, una mujer antigua, una armadura, calor, voces....
Cada vez que despertaba, se sentaba frente a la computadora. Buceaba en un relato de caballeros y damas enamoradizas. Dragones y fuego, mucho fuego.
Ella se le parecía tanto.

Aquella noche estaba especialmente nervioso. Los truenos, aleteo feroz; relámpagos, fuego irradiándose sanguinario, por todas partes. Recordándole quién era.
Refugiado frente a la computadora, iba ya por el cuarto capítulo. Cuando mataba al dragón, cuando la rescataba. Pero ella, por un antiguo hechizo, se había enamorado de la bestia. Su amada no lo recordaba. Su princesa, encadenada en aquella cueva, entre oro y brillos, prefirió morir junto al dragón que salvarse con Sir Paul.
A ella no le sucedería lo mismo.

La llamó por teléfono, manifestó que estaba descompuesto. – Salvarla, salvarla- retumbaba en su cerebro.
La convidó con un licor ámbar. En ese momento, ella se sintió trasportada a una dimensión superior. Pablo, la tomó en sus brazos y comenzó a besarla. Sus manos fueron imparables debajo de la blusa inerme. Estaba en un estado de salvajismo hipnótico.
Pablo aprovechó el momento. Lascivos pasaron horas y horas copulando. Su sexo, su cuerpo entero eran para él. Lo amaba con todas sus fuerzas. Su ser completo le pertenecía.

Aquel antiguo hechizo, que dejó marcas en todo su cuerpo


©Viviana Álvarez

2 comentarios:

Rayén* dijo...

me encantó esto...
y el anterior q también habla de Pablo, también =)
tenés el re talento, a mí me encanta escribir también, y cuando leo cosas así, me dan más ganas de escribir y me inspiro jaja.
suerte, nos estamos leyendo!

Anónimo dijo...

¿De quién es la imagen del dragón? Lo digo porque no veo referencia ni crédito alguno…