viernes, abril 27, 2007

de mí I






Entenderás de qué hablo, cuando derrapes infiernos. Cuando creas que la salida es esperanza fútil.
Entenderás por qué mis lágrimas, cuando esperes con manos vacías la ilusión que se posterga.
Entenderás mis silencios, cuando insómnicas noches cierren tu garganta y se convierta tu almohada en cemento.
Verás entonces que no deliro, que es posible ser incorpóreo aunque sientas la piel y los huesos.
Verás que es elección la locura y la noche y los salmos célticos.
Sólo quiénes buceamos mar adentro de vez en donde, renacemos en alondras que no rinden sus alas.



©Viviana Álvarez

2 comentarios:

Angela Ladeiro dijo...

São lindas as fotos e os poemas, embora não compreenda bem a língua para valorizar os detalhes, seguirei vendo o teu blog.

Anónimo dijo...

¡Qué gran descubirmiento! en nuestro interior tenemos plegadas las alas.
MARITA RAGOZZA